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miércoles, 25 de abril de 2012

Google Drive es grandioso... ¿ahá? ¡Ahora veamos su parte más oscura!


Durante el día de ayer Google mostró al tan esperado Google Drive. Un servicio propio de este gigante de la tecnología y la web, para almacenamiento de archivos, fotos y datos en la nube.

Google Drive es una especie de disco duro virtual donde podemos alojar, guardar y compartir contenido y acceder a él desde cualquier computador con Windows, Mac OS y cualquier dispositivo con Android OS con soporte para este servicio. Además en un futuro muy próximo también estará disponible para dispositivos con iOS. 

Desde ya muchos han catalogado Google Drive como la más revolucionaria y grandiosa herramienta en su tipo. Y no quiero decir que no lo sea, a diferencia de servicios del almacenamiento en la nube como Dropbox, iCloud y SugarSync, este nuevo servicio en la nube de Google integra tecnologías no vistas en servicios fremiun.  

Para un mayor detalle les recomiendo leer un artículo publicado por Eliax, donde expone en forma exhaustiva características de Google Drive no vistas en otro productos similares. Como un buscador contextual que permite hacer búsquedas de imágenes utilizando reconocimiento OCR. Colaboración y edición simultanea de documentos con otras personas y visualización de más de 25 tipos de archivos distintos, entre otras.   

En este artículo yo solo quiero comentarles sobre las normas y condiciones de uso de este nuevo servicio de Google. Esto si que ha llamado poderosamente mi atención. Porque es la parte más oscura donde sí se evidencia la mayor diferencia de Google Drive con otros servicios similares. 

"Al subir contenido o al enviarlo por otros medios a nuestros Servicios, concedes a Google (y a sus colaboradores) una licencia mundial para usar, alojar, almacenar, reproducir, modificar, crear obras derivadas (por ejemplo, las que resulten de la traducción, la adaptación u otros cambios que realicemos para que tu contenido se adapte mejor a nuestros Servicios), comunicar, publicar, ejecutar o mostrar públicamente y distribuir dicho contenido. Google usará los derechos que le confiere esta licencia únicamente con el fin de proporcionar, promocionar y mejorar los Servicios y de desarrollar servicios nuevos. Esta licencia seguirá vigente incluso cuando dejes de usar nuestros Servicios."
Traduciendo estas condiciones a un lenguaje más llano, las políticas generales de Google son el equivalente a tener una pareja  bastante interesada (saludos por allá) donde comparto mi vida con esa persona, pero al final lo mío es suyo, pero lo suyo es solo de él. Y aunque yo decida abandonarlo por esta razón, lo mío seguirá siendo suyo cuando ya no estemos juntos. ¡Sú santísimo!.

 En buen dominicano, literalmente Google puede hacer lo que le de la gana con el contenido que guardamos en  Google Drive.

Ya les había advertido que con Google debemos comenzar a tener cuidado. Sus últimos movimientos, como eliminar la sincronización de Blackberry con sus servicios, cobrar por el uso del API de Google Maps luego de ser gratuita, entre otras perlas que han surgido recientemente, nos gritan que debemos cuidarnos. 

Al utilizar Google Drive estamos aceptando sus políticas de privacidad (que casualmente privan de privacidad nuestros datos) nos gusten o no. Y esa es la parte oscura de este maravilloso servicio, que me interesa que ustedes también tomen en cuenta al momento de decidir si quieren  o no utilizarlo. 

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